Dale vida a los sueños que alimentan el alma,

no los confundas nunca con realidades vanas.

Y aunque tu mente sienta necesidad humana,

de conseguir las metas y de escalar montañas,

nunca rompas tus sueños, porque matas el alma.


Dale vida a tus sueños aunque te llamen loco,

no los dejes que mueran de hastío, poco a poco,

no les rompas las alas, que son de fantasía,

y déjalos que vuelen contigo en compañía.


Dale vida a tus sueños y, con ellos volando,

tocarás las estrellas y el viento, susurrando,

te contara secretos que para ti ha guardado

y sentirás el cuerpo con caricias, bañado,

del alma que despierta para estar a tu lado.


Dale vida a los sueños que tienes escondidos,

descubrirás que puedes vivir estos momentos

con los ojos abiertos y los miedos dormidos,

con los ojos cerrados y los sueños despiertos…


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Vaya este poema del maestro Benedetti y esta imagen de cosecha propia para MªJosé, mi hermana virtual, que de esto de soñar... sabe un rato.